La apuesta de la actual administración, planteada desde la época de campaña de Rafael Martínez, es la de continuar las obras que dejó su antecesor, Carlos Caicedo Omar, sin embargo, lo que está planeando hacer la Alcaldía de Santa Marta con los centros de salud –obras inconclusas desde la anterior administración– dejan entrever un gran elefante blanco a punto de ser ‘tapado’ con nuevos recursos.

Gracias a los dineros que le aprobó el Concejo de la ciudad al alcalde Martínez en días pasados, la Alcaldía planea adelantar un proceso de contratación para la “adecuación y terminación de los centros de Salud IPC La Candelaria, Centro de Salud La Paz y Centro de Salud de Taganga”, por un valor de 6 mil 79 millones 518 mil pesos.

Lo irónico del asunto es que estos dineros irían destinados a terminar las obras inconclusas del contrato que en agosto de 2014, durante la administración de Caicedo, se adjudicaron a través de la ESE Alejandro Próspero Reverend para el “mantenimiento y adecuación de los centros de salud Bastidas, Candelaria, Mamatoco, Taganga y La Paz”, que en aquella época se ejecutaron por un valor de 6 mil 537 millones 866 mil pesos.

Llama la atención que el nuevo contrato, aún en etapa de borrador, será ejecutado con un presupuesto tan solo 458 millones de pesos menos que el que se hizo en el periodo en el que se contrataron las obras, lo que da a entender que prácticamente la ejecución de estas obras debe volverse a hacer desde cero, o al menos, con la misma cantidad de plata ya invertida.

Asimismo, pese a que el presupuesto de la nueva contratación es casi igual al anterior, en esta nueva contratación no se tiene en cuenta en el objeto social a los centros de salud de Bastidas, que fue inaugurado por Carlos Caicedo el 24 de octubre de 2015 tras varios tropiezos, ni el de Mamatoco.

La modernización de la red pública hospitalaria fue una de las grandes apuestas de las que Caicedo hizo mayor eco durante su administración, pese a que estas quedaron sin terminar durante su periodo.

Esta intención de la Alcaldía es una jugada de ajedrez, pues la corporación edilicia había aprobado un rubro de inversión de 8 mil millones de pesos a la Alcaldía para afrontar la crisis de salud del Distrito, la cual según ha dicho el propio Martínez, asciende a los 17 mil millones de pesos. Sin embargo, la Alcaldía planea usar el 75% de esos recursos aprobados para tapar las obras inconclusas que dejó el alcalde anterior.